
Muchos preguntaréis qué tiene de malo que un semidiós ayude al prójimo y luche sin descanso contra los villanos que aterrorizaban a los pobres helenos. Pues bien, es que la serie está muy mal hecha, y no me refiero sólo a los personajes medio acartonados con una sobreactuación sin igual, sino también a los que hacían pasarse por seres mitológicos. En algunos capítulos he llegado a ver intentos de centauro que eran desastrosos, con unas orejas que parecían lanzas y unas patas que eran zancos. Horrososo.
Pero no contentos con eso, la música elegida para la ocasión es el culmen a la serie, una obra sólo al alcance de unos cuantos virtuosos. Cómo con tan poco recorrido que tiene la música en los capítulos puedes hacer una canallada similar. Dicen que en una película la banda sonora puede arreglar un mal filme, pero que una mala composición musical puede estropearla. Pues aquí ni una cosa ni otra. Lo cutre atrae a lo cutre. Lo siento por Kevin Sorbo, pero los experimentos con gaseosa.
La serie era infumable. No había por donde cogerla. Creo que nunca he visto un capítulo entero. Lamentable.
ResponderEliminarnos vemos